sábado, 31 de enero de 2015

Cenaco



La vida de los niños en los pueblos, o al menos como yo la recuerdo, no tenía muy en cuenta las cuestiones higiénicas y de formalidad social que son más habituales en las ciudades.
Cuando salíamos a jugar al escondite o a” tres marinos en el mar” nos arrastrábamos por el suelo, o pisábamos un charco, nos metíamos en una regadera o en el río y no solíamos tener gran cuidado por la limpieza.

Especialmente sucios llegábamos cuando veníamos del río o de coger ranas. A menudo uno se encontraba con zonas de lodo fino que se pegaban a la piel y a la ropa. A ese lodo le llamamos “cenaco” . Y a veces, por extensión, a un niño que aparece en casa todo sucio se le puede decir que “viene hecho un cenaco” o , si es reincidente, que “es un cenaco” .
Investigando la palabra la encuentro, como no, en la wiki rioja. Conozco dos de la acepciones que en ella aparecen ( aunque no registra el uso en la zona de Ribafrecha-Murillo), pero no la tercera:
  1. Dícese del chico que va muy sucio. Arnedo, Entrena.
  2. Cieno, barro pantanoso y mal oliente. Canales, Ventrosa, Mansilla, Viniegra de Abajo.
  3. Tierra húmeda que se encuentra cerca de los arroyos y se emplea como masa de yeso para revocar los tabiques. Ojacastro.
En la RAE no aparece esta palabra. Lo más cercano es “cenaga” que en la zona de Burgos es un lodazal. 

Mis cortos conocimientos me hacen suponer que “cenaco” es una derivación popular o local en la que dos oclusivas “g” e “c” acostumbradas a alternanse ocupan el lugar de la otra  dependendo de las zonas. (Me hace recordar las clases de latín en el Elhuyar con Eliseo Saez Ripa ) Espero no estar diciendo una herejia de evolución fonética, es lo que me parece.

domingo, 25 de enero de 2015

El gitano Viniegra...que no iba a misa por llevar la contraria a Dios

 
Por la vida, y particularmente por la infancia de todos nosotros, pulularon seres fantásticos de lo más variopinto. Desde el "coco" al "burro'l gitano" que murió cuando se había acostumbrado a no comer o el "hombre del saco"...

Por la mía se paseaba con frecuencia el “gitano Viniegra” (posiblemente recortando la expresión “gitano de Viniegra”, aunque sin precisar si de Arriba o de Abajo). Por cierto, ambas Viniegras son parte de la comarca riojana llamada de las Siete Villas y en esta zona existe un topónimo significativo: el Collado del Gitano.

Este personaje forma parte de una expresión que he oído mil veces en casa, especialmente a mi padre: ”Eres como el...” o “eres peor (pronunciado [ 'pjor ] ) que el gitano Viniegra, que no iba a misa por llevar la contraria a Dios”. La expresión viene a cuento cuando una persona se empeña en hacer algo de forma diferente de la habitual, desoyendo la tradición o los consejos de otra persona que, teóricamente, sabe de sobra como ha de hacerse. Como buscando la ruptura con lo establecido,  como sintiendo placer en hacerlo diferente en llevar la contraria.

Suele venir muy a cuento en época adolescente cuando crees que cada una de tus acciones va a inventar un mundo nuevo y buscas el choque con los consejos y modos de hacer de la gente mayor. En esos casos escuchas que “eres peor que el gitano Viniegra, que no iba a misa por llevar la contraria a Dios”. Otras veces será la cantinela con que se critique a la persona de carácter que se empeña en hacerlo todo como él lo ve, desafiando rutinas y tradiciones. 

La expresión me sugiere que a este gitano no le importaría ir a misa... pero puestos a desafiar, que sea a lo más alto.

viernes, 16 de enero de 2015

"A rejón" y "a Santamarina"




Uno de los recuerdos que resisten de los veranos que pasabamos de niños en Ribafrecha es la cantidad de tiempo que pasábamos en la calle: la huerta, los pozos de la Loca o de los Estudiantes, Valempudia, Puente Laidiez ... En este deambular de niños, de juegos de policías y ladrones o de “tres_marinos_en_el_mar” a veces nos tocaba a los hermanos mayores cuidar de los pequeños ( cosa que no siempre hacíamos de buena gana ) En todo caso era un trabajo que nos obligaba muchas veces a cargar con los más pequeños, incluso literalmente: llevarlos a cuestas.

Esto me trae al recuerdo dos expresiones muy características. Una la usábamos cuando se cargaba con una persona a la espalda. Normalmente las piernas del transportado colgaban para adelante y el “transportista” le agarraba de los muslos o del culo para aguantar el peso. En ese caso decíamos que lo llevábamos “a rejón” o "a rejones".

 ¡Cuantas veces no tuvimos que coger a un hermano o primo pequeño “a rejones” para cruzar el río o una regadera! En la wikirioja encuentro esta expresión como riojanismo y lo cierto que nada en el diccionario de la real Academia me lleva a este significado del término rejón.

En la citada wikirioja se registra que en Zarratón, Cordovín o Alesón quiere decir a hombros, pero en mi infancia llevar a hombros a otra persona tenía su propio nombre. Decíase, por ejemplo, que fulano llevaba a su hijo o cogía a su hermano “a Santamarina”. ¡Hermosa expresión!¿no creeis?

sábado, 10 de enero de 2015

Aguilando

No quiero que pasen estas fechas para registrar otra palabra de riojano. En mi casa, a mi madre o mi abuela Juana  siempre les he escuchado hablar de los "aguilandos" por Navidad. Era la propina que se pedía a los mayores como regalo por estas fechas ( Tenía noticia, aunque no lo haya vivido,  de la tradición de dar un aguinaldo en las ciudades al sereno, cartero o basurero. No conozco en la Rioja la preciosa tradición de Herrera del Duque de que los niños fueran por la casas del pueblo cantando para que les dieran a cambio el aguinaldo)

En cuanto a la palabra, una vez más parecía que esa forma  "aguilando" que yo escuché esta navidades a mi madre,   era una deformación popular por medio de una metátesis de la palabra original " aguinaldo" ( algo parecido a lo que me pasó con toballa)...Pero no hay nada mejor que cuestionarse estos juicios previos.

Lo cierto es que la forma  "aguilando" está recogida en el DRAE, donde podemos leer que el origen de nuestro actual «aguinaldo» está en la frase latina hoc in anno, 'en este año', que se empleaba como refrán de las canciones populares de Año Nuevo, y «aguinando» es forma intermedia más próxima al origen que «aguilando». 
Hay sobre ésto testimonios literarios antiguos como podemos leer en el foro de Instituto Cervantes:
 Estamos en la primera mitad del siglo XV. El marqués de Santillana escribe uno de sus Decires líricos:



Sacadme ya de cadenas,
señora, e fazedme libre,
que Nuestro Señor vos libre
de las infernales penas.
Estas sean mis estrenas,
esto solo vos demando,
este sea mi aguilando
que vos faden fadas buenas.

Algún tiempo antes —finales del siglo XIV o primeros años del XV—, el Cancionero de Baena recoge una composición de Alfonso de Villasandino:


Esto ofresco en aguinando,
señora, esta Navidat
a vos, por quien ledo ando,
sin error e torpedat.